EDUARDO MÉNDEZ
Los efectos que producen los kilos de más en la salud y la apariencia, así como la influencia que ejercen sobre el hecho de ser aceptado socialmente han sido estudiados no sólo por nutricionistas, sociólogos y científicos en general. Lo nuevo es que, según un estudio realizado por la Universidad de Ohio, Estados Unidos, las personas delgadas y saludables tienen más posibilidades de recibir una herencia o de incrementar sus ganancias.
Los efectos que producen los kilos de más en la salud y la apariencia, así como la influencia que ejercen sobre el hecho de ser aceptado socialmente han sido estudiados no sólo por nutricionistas, sociólogos y científicos en general. Lo nuevo es que, según un estudio realizado por la Universidad de Ohio, Estados Unidos, las personas delgadas y saludables tienen más posibilidades de recibir una herencia o de incrementar sus ganancias.
En concreto, el profesor Jay L. Zagorsky, del Centro de Investigaciones en Recursos Humanos de esa universidad, asoció el hecho de que las personas hayan perdido grandes cantidades de peso con el aumento de su patrimonio. De hecho, Zagorsky revela que entre 1980 y 2001 -periodo en que Estados Unidos experimentó un incremento en la tasa de obesidad- disminuyó la disposición de la gente a ahorrar e invertir de 10,2% a 2,3%.
Aun cuando el estudio de la Universidad de Ohio no determinó la relación directa entre obesidad y ahorro, sí observó que los cambios en la salud estaban impulsados por los cambios en los hábitos de ahorro. El punto de encuentro que plantea Zagosky está en que las ayudas sociales que reciben las personas obesas les hacen un flaco favor a su motivación por conseguir un buen trabajo o construir su patrimonio a partir de su trabajo y fondos propios.
Además, está comprobado que los estándares sociales suelen favorecer a las personas delgadas sobre las que sufren de sobrepeso. Así, es posible que las personas delgadas tengan más probabilidades de ser recompensadas por sus padres o por las empresas a través de herencias o transacciones.
Para leer el estudio completo de Zagorsky acceda al documento PDF haciendo click aquí.
Fuente: INFP